Caballerizas de la Reina Madre.
Marquet sitúa las Cocheras de la Reina Madre en un eje longitudinal paralelo al de la plaza de Abastos, subrayado por sus dos entradas realzadas en sus fachadas representativas a las calles del Rey y Capitán. Esto puede ser debido a que el proyecto del edificio fuera previo al de la plaza o bien por una voluntad de establecer un cierto distanciamiento intencionado, entre una plaza que había de soportar la actividad del Mercado de Abastos y un edificio, que aunque de servicios, no dejaban de ser servicios reales.